Este parto ha comenzado muy diferente que los otros. Primero porque he sentido una gran presión por parte de todos. Desde que me fui a casa de mi mamá, me llegaban mensajes y llamadas telefónicas de parientes y amigas preguntando si ya iba a nacer. En vez de disfrutar el tiempo que quedaba me empecé a preocupar porque aún no nacía y cuánto tiempo iba a faltar.
al cumplir la semana 37 lo primero que hicimos fue ir a hacer el ultimo ultrasonido. Los doctores que nos atienden en esa clínica son excelentes y sus estudios realmente los hacen con maestría. El bebé ya estaba boca abajo pero aún no estaba encajado lo que si nos dijeron era que el bebe estaba pensando ya 3 kilos y 200 gramos. La verdad es que tomamos el dato a la ligera porque todos los demás bebes pesaron entre 2800 y 2500 y mientras más embarazos con menos peso habían nacido.
Pasó la semana 37 y nada. Empezó la semana 38, yo estaba más nerviosa y cansada cada día. Mi esposo estaba feliz porque hacía tiempo que no tenía vacaciones y estaba aprovechando muy bien el tiempo. Mis papás estaban algo cansados y sobre todo mi papá preguntaba todos los días si ya iba a nacer el bebe. Un día empecé con algunas contracciones más duras y seguidas durante la noche. Al día siguiente en la mañana tuve una secreción marrón. Muy poca como para que fuera el tapón mucoso pero ya al menos era algo. Ese día estuvo tranquilo y durante la noche tuve contracciones irregulares que eran entre cada diez, veinte o treinta minutos. No pude dormir. Al día siguiente en la mañana todo tranquilo.
Pasé otra noche como la anterior, contracciones a cada rato pero nada regular. No pude descansar. Al día siguiente pensamos que sería mejor si mi médico me pudiera revisar, pero estaba bastante lejos. No queríamos ir al hospital porque nos habían tocado siempre malas experiencias con los médicos de guardia. Mi doctor nos dijo que nos podía atender en la tarde en su consultorio (que está a más de una hora de camino de casa de mis papás, y lo peligroso es que si hay demasiado tráfico puedes hacer hasta dos horas de regreso o más). Nos quedó de atender a las dos de la tarde y nosotros nos fuimos desde las 11 dela mañana. Hicimos una escala en un centro comercial que está cerca del hospital, ahí comimos y caminamos (un poco) porque yo no quería que de repente fuera a nacer mi bebé en el centro comercial.
A las dos de la tarde suena mi celular, que el doctor iba a llegar hasta las tres y media. Yo empecé con contracciones más fuertes. Caminamos un rato más y llegamos al doctor…sonó mi celular, que lo esperara un poco más. Total que acabé entrando al consultorio a las 4 de la tarde. Ya tenía 3 cm de dilatación y el 70% del cuello borrado. Me dijo que podría nacer ese día o bien al día siguiente o el fin de semana (era jueves). Nos regresamos a la casa, pero nos equivocamos de camino y en lugar de tomar la carretera (vía rápida) nos metimos en el tráfico de la ciudad. Llegamos a cada de mis papás a las 6:30pm, y yo estaba agotada. Me acosté un rato, pero empecé con dolores terribles y muy fuertes. Me puse a contar el tiempo. A las 9 pm ya tenía contracciones cada 5 minutos y bajé con las cosas del hospital y nos fuimos.
Como le habíamos avisado al doctor que íbamos en camino, casi llegamos al mismo tiempo. Ya tenía 5 cm de dilatación y el cuello borrado. El doctor mandó que me pusieran suero y una bolsa más con oxitocina por si se necesitaba, pero la enfermera dejó abierta la oxitocina como si fuera suero normal y al minuto empecé a tener unos dolores realmente terribles, mi cuerpo se puso rígido y la panza también, empecé a gritar de dolor. Mi doctor entró rapidísimo y vió el error, cerró la oxitocina, pero ya me habían lastimado horrible y el dolor ya no se me pasaba.
Me subieron rápido a la sala de labor, estuve ahí una hora nada más en lo que me preparaban para el nacimiento, me pusieron la epidural y no dije nada, ya tenía muchísimo dolor que no había sido natural, eso me da muchísimo miedo, pero pasó sin más.
Dilaté muy rápido, ya estaba lista para dar a luz. Nos movimos al quirófano y empezó realmente el trabajo de parto. Mi bebé estaba enorme, como había predicho el último ultrasonido, y no fue nada fácil traerlo al mundo, dos veces salió una parte de la cabeza y dos veces se regresó. Pujé y pujé y nada, entre le dolor y el cansancio ya no sabía qué más.
Mi doctor metía la mano tratando de ver qué pasaba y eso me dolía todavía peor (y eso que tenía la anestesia) y otra doctora me empujaba la panza, sentía que me querían exprimir como limón.
Después de varios intentos, dolor, cansancio hasta el extremo, por fin nació y escuché su hermoso llanto. Estaba enredado en el cordón con los pies, como si estuviera haciendo rapel, ay esta vez me dolió muchísimo y quedé terriblemente lastimada por todas partes.
Me llevaron a la sala de recuperación y pensé que iba a descansar, estaba tranquila después de tanto dolor y emocionada por mi bebé. Llegó una enfermera y me dijo: le voy a poner un suero….y miré mis sueros…estaba todavía la bolsa terrible de la oxitocina, que además no estaba etiquetada como se debía, y le advertí a la enfermera, pero ella me contestó: no, esta ya es otra, la cambiaron. Y obviamente no, la abrió y de nuevo empecé con los horribles dolores que casi me matan antes. Asustada retiró la bolsa y luego dijo que no había ni una bolsa ahí. Pero por ese error, en lugar de estar en la sala de recuperación una hora estuve 4.
Cuando salí del hospital, estuve muy adolorida y cansada la primera semana y después ya empecé a mejorar. Hasta ahora no he sentido nada de «dolor por los entuertos»
Mi pequeño fue un bebé grande, pesó 3 400, está tomando leche materna y está como cualquier bebé recién nacido, llora, come y a veces duerme.